PRUEBAS DIAGNÓSTICAS
Cada caso es único, sin embargo, existe una prueba llamada estudio de la pareja infértil que,
como protocolo, siempre realizamos a ambos.
En el caso de las mujeres el estudio de la pareja incluye estas pruebas:
- Ecografía ginecológica: es un tipo de ecografía que permite evaluar la anatomía del útero y ovarios para detectar si existen miomas uterinos (tumor benigno en el útero) y quistes ováricos (saco lleno de líquido que se forma sobre o dentro de un ovario).
- Histerosonografía: es un tipo de ecografía del útero que utilizamos cuando existen problemas uterinos como pólipos endometriales (crecimientos que se adhieren a la pared del útero) y miomas submucosos y miomas intramurales con componentes submucosos (tumores benignos que crecen debajo de la mucosa del útero).
- Histerosalpingografía: es un tipo de ecografía del útero similar a la histeresonografía (pues también analiza la cavidad uterina), pero que además nos permite evaluar la permeabilidad de las trompas de Falopio.
- Seguimiento folicular por ecografía: es un estudio de la ovulación que consta de una serie de ecografías con las que determinamos si existen folículos ováricos y el crecimiento de los mismos para poder realizar procedimientos de inseminación o fertilización in vitro.
Adicionalmente, realizamos estas dos pruebas que se encargan solo de ser necesario (no de rutina):
- Laparascopía: es una técnica operatoria mediante la cual ingresamos una pequeña cámara especial a la cavidad abdominal y pélvica de la paciente para evaluar el útero, trompas de Falopio y ovarios. La utilizamos para detectar si existen lesiones o tumoraciones, y determinar si las trompas están permeables o alguna otra patología que interfiera con la fertilidad.
- Histeroscopía: es una técnica operatoria mediante la cual se ingresa una pequeña cámara especial por vía vaginal para determinar si hay lesiones, adherencias, malformaciones y tumoraciones en el útero para tratarlas.
En el caso de los varones el estudio de la pareja se refiere a:
- Espermatograma: es un análisis del semen del paciente donde evaluamos la cantidad, movilidad y alteraciones de los espermatozoides (lo que se conoce como calidad espermática).
Adicionalmente, realizamos estas dos pruebas que se encargan solo de ser necesario (no de rutina):
- FISH en espermatozoides: técnica citogenética (estudio de la estructura, función y comportamiento de los cromosomas) que es útil para descartar problemas genéticos en los espermatozoides, que podrían afectar la formación de los embriones.
- Fragmentación de ADN en espermatozoides: mediante esta prueba determinanos si los espermatozoides tienen daño en el ADN.